La feminización del maxilar inferior y el mentón tiene un rol muy importante dentro del resultado en conjunto ya sea con cambios drásticos o sutiles.

El Género de la Mandíbula
La mandíbula masculina comprende un conjunto de características que pueden influir en la percepción del género facial. Es más fácil de entender la mandíbula si miramos por separado el ángulo mandibular y el cuerpo mandibular.
El ángulo mandibular en los hombres suele ser más cuadrado y tiene las esquinas bien definidas, así como el cuerpo mandibular suele tener un mayor volumen de hueso. Esto se traduce en un tercio facial inferior más ancho en los hombres y también le confiere a la mandíbula masculina una mayor altura vertical, un factor importante cuando se planifica la remodelación de la mandíbula para la Cirugía de Feminización Facial (CFF).

Feminización del Mentón
Remodelación del mentón
Afortunadamente, los parámetros del mentón se pueden modificar significativamente desde diferentes aspectos: el ancho, el alto y la proyección. Los cambios variarán según las características anatómicas de cada paciente y el resultado que se desee.
El tipo de técnica utilizada también dependerá de las características de cada paciente. Por ejemplo, una genioplastia puede seccionar el mentón de adelante hacia atrás, separando el segmento del mentón de la mandíbula.
Al eliminar diferentes segmentos, el cirujano puede modificar el largo y el ancho, obteniendo la proyección o regresión que queramos. Los segmentos se fijan con mini placas imperceptibles y tornillos de titanio, y las incisiones se cierran con puntos reabsorbibles intraorales.
A veces, también se realiza una liposucción para eliminar el exceso de grasa debajo del mentón y así obtener una mejor definición final del mentón.
El enfoque y las técnicas quirúrgicas
En las intervenciones quirúrgicas de Facialteam para la Feminización de la Mandíbula y del Mentón, se realizan minúsculas incisiones dentro de la boca (que quedan invisibles tras la operación) con gran precisión gracias a la más avanzada tecnología para el aumento de visión del campo a tratar (lupas quirúrgicas que mejoran y aumentan la visión del cirujano). El uso de materiales reabsorbibles (hilos de sutura que se disuelven a partir de la segunda semana) facilita la recuperación postquirúrgica, eliminando la necesidad de retirar las suturas. Las osteotomías para la feminización del maxilar inferior se ejecutan con tecnología de ultrasonido de última generación, que permite a los cirujanos realizar cortes óseos de alta precisión sin dañar el tejido adyacente (nervios, vasos sanguíneos, músculos). Ninguna de las técnicas que Facialteam emplea para feminizar la mandíbula y el mentón afectan a los dientes ni la forma en que se encuentran (oclusión).

En algunos casos, especialmente en pacientes de mayor edad, el tejido blando puede estar menos terso para readaptarse por completo a los cambios en la mandíbula inferior y la zona del mentón. En estos casos, puede ser necesario el estiramiento quirúrgico de los tejidos blandos. Este segundo tratamiento no debe hacerse al mismo tiempo que la cirugía de mandíbula y el mentón, sino varios meses después, cuando la inflamación de la cirugía haya remitido.